La crítica literaria ha dicho...

Sobre Del mar y sus vestigios (2013)

«El mar se configura en este libro como algo que va más allá de un mero trasfondo poético (…). El mar aparece constantemente interpelado por la voz poética: se revela como un mundo tan amplio como denso, portador de enigmas y secretos al que el poeta intenta pedir explicaciones e incluso arrancar respuestas para los numerosos interrogantes forjados en una adolescencia que, como las olas, fluye y refluye sin cesar».

María del Carmen García TejeraSpeculum, nº 14, Otoño 2013, págs. 38-39

Sobre La mirada afónica (2016)

«El discurso crítico sobre la contemporaneidad, pertrechado de una ironía lúcida, con toques de viñetista, aparece bien diluido entre sus versos libres (…), incluso en aquellas partes más sugestivas. Se asemeja más a una forma de mirar, de afrontar su responsabilidad de decir algo al respecto. Dicho ánimo lapidario adquiere su mejor resultado en los últimos tres o cuatro versos de los poemas, pues el autor suele enfrascar su conclusión en tonos ásperos y sombríos, como si el final respondiera a una variación empozada y más desengañada del asunto. Un hachazo tras la melodía».

«Cualquier lector o crítico avezado en la poesía reciente habrá advertido que Jorge Andreu supone una rara avis en el panorama nacional. En estos meses, con la etiqueta “poesía” en boga como valor editorial, muchas contraportadas han hablado de autores accesibles, de clara voz, que dejan a su paso un reguero de apuntes agudos e interesantes para el lector perspicaz. Con La mirada afónica hubieran acertado. Definitivamente Jorge Andreu est un autre».

Álvaro López Fernández, Cuadernos de Aleph, 2017, nº 9, págs. 230-235

Sobre Amor nos llora (2018)

«La poesía de Jorge Andreu, como la de otros muchos jóvenes a los que tampoco va a ser fácil hallar en la mayoría de las librerías patrias, se aleja del eslogan, de la rima fácil, del efectismo retórico y de los versos sentimentaloides no aptos para diabéticos. Su opción, o al menos la que se desprende de su poesía última (…), es la que se decanta por la plena conciencia del terreno que pisa, del género en el que pretende desarrollar su literatura, que en su caso concreto se traduce en una acendrada búsqueda de la palabra necesaria y exacta, a la manera de Juan Ramón Jiménez».

Juan Carlos Sierra, Estado crítico, 20/09/2019